Cuando el fuego hiberna bajo la turba y revive meses después: riesgos para carbono, salud y clima
Redacción Noticias de la Tierra
Un fuego que no se apaga: cómo se mantienen latentes
Los incendios “zombi” son focos que persisten humeando bajo tierra durante el invierno boreal, en turberas ricas en carbono. La combustión lenta, protegida del viento y alimentada por materia orgánica, permite que el foco sobreviva a nevadas y bajas temperaturas. Al llegar la primavera, el calor y la desecación reactivan las llamas en superficie.
Por qué están aumentando y qué los alimenta
El calentamiento en altas latitudes acelera el deshielo del permafrost y alarga veranos secos, dejando combustibles expuestos. Las turberas drenadas o degradadas pierden humedad, se contraen y se vuelven más inflamables. El resultado es un ciclo de ignición–latencia–reactivación difícil de romper sin restaurar la hidratación del ecosistema.
Costos que van más allá del bosque
Además de daños locales, estos incendios oxidan reservas antiguas de carbono y emiten humo fino que recorre largas distancias, afectando salud humana y operaciones aéreas. La pérdida de la “esponja” de turba altera la hidrología, induce subsidencia del terreno y compromete infraestructura (carreteras, oleoductos, asentamientos).
Detectar, apagar, restaurar
La respuesta eficaz combina detección satelital invernal, patrullaje con sensores térmicos y rehumedecimiento de turberas para elevar el nivel freático. Cortafuegos en mosaico y quemas prescritas en condiciones seguras pueden reducir combustible superficial. Involucrar a comunidades locales e indígenas es clave para una vigilancia temprana y una gestión compatible con modos de vida tradicionales.
Un frente climático costo-efectivo
Evitar el drenaje y restaurar turberas degradadas es una medida de alto impacto climático y co-beneficios de biodiversidad. Financiarla vía fondos de carbono y adaptación puede resultar más barato que asumir costos repetidos de incendios, salud y reconstrucción.
Referencias
Nature Geoscience; PNAS (incendios zombi y turberas); ESA/NOAA (detección); UNEP (restauración de turberas)










