Manglares: defensores naturales contra el cambio climático y la erosión costera


Los manglares son ecosistemas únicos situados en las zonas tropicales y subtropicales del planeta. Formados por árboles y arbustos adaptados a aguas salobres, cumplen funciones esenciales: protegen las costas frente a tormentas, almacenan carbono y sirven de hábitat para miles de especies. Sin embargo, pese a su importancia, los manglares han sido destruidos a un ritmo alarmante debido a la urbanización, la expansión agrícola y la acuicultura.


Redacción Noticias de la Tierra


El papel vital de los manglares

Los manglares actúan como barreras naturales contra la erosión y los desastres climáticos. Sus densas raíces disipan la energía de las olas, reduciendo el impacto de ciclones y tsunamis.

Además:

  • Capturan carbono azul: almacenan hasta cinco veces más carbono que los bosques terrestres.
  • Son viveros naturales: albergan peces, moluscos y crustáceos que sostienen la pesca artesanal.
  • Purifican el agua: filtran sedimentos y contaminantes, mejorando la calidad del agua costera.

Amenazas a los manglares

La pérdida de manglares ha alcanzado niveles críticos. Según datos de la FAO, más del 20 % de la superficie mundial de manglares desapareció en los últimos 40 años. Las principales amenazas son:

Restauración y conservación

Diversos países han implementado programas de restauración de manglares, reforestando áreas degradadas con especies nativas y trabajando con comunidades locales. Estas acciones no solo fortalecen la biodiversidad, sino que también aportan beneficios económicos a través del ecoturismo, la pesca y el aprovechamiento sostenible de recursos.

La cooperación internacional, la investigación científica y la educación ambiental son pilares clave para garantizar la supervivencia de estos ecosistemas.

Un escudo natural para el futuro

Los manglares no son solo bosques costeros: son auténticos aliados frente al cambio climático y garantes de la seguridad alimentaria de millones de personas. Su conservación y restauración son una inversión estratégica para la resiliencia de las comunidades costeras y la salud del planeta.