La pérdida de oxígeno provocada por el clima en el Mar Negro hace miles de años desencadenó la proliferación de microorganismos capaces de producir metilmercurio, una potente neurotoxina. Esto se demuestra en un nuevo estudio publicado en Nature Water , dirigido por Eric Capo de la Universidad de Umeå, que sugiere que procesos similares podrían ocurrir en los océanos actuales, que se están calentando.

El metilmercurio es un compuesto altamente tóxico que se acumula en el pescado y el marisco, lo que supone graves riesgos para la salud humana. Se forma cuando ciertos microbios convierten el mercurio inorgánico en condiciones de bajo oxígeno .
Hoy en día, el cambio climático está provocando la expansión de estas zonas con escasez de oxígeno en entornos marinos costeros, incluyendo partes del mar Báltico. Las aguas más cálidas y estancadas se mezclan con menos eficiencia, y el aumento de la proliferación de algas contribuye a la pérdida de oxígeno en las capas más profundas, creando condiciones ideales para estos microbios.
Rastros de microbios antiguos
Al analizar el ADN de sedimentos del Mar Negro de los últimos 13.500 años, los investigadores detectaron genes (hgcA) asociados con microorganismos productores de metilmercurio . La mayor abundancia se produjo durante el período cálido y húmedo, hace unos 9.000 a 5.500 años, cuando los niveles de oxígeno en el agua disminuyeron significativamente, una situación similar a las tendencias actuales observadas en los mares y zonas costeras actuales.
«Nuestros hallazgos muestran que el calentamiento climático y la pérdida de oxígeno por sí solos, sin la contaminación industrial por mercurio, pueden crear puntos críticos para la producción de metilmercurio», afirma Capo, profesor adjunto del Departamento de Ecología y Ciencias Ambientales de la Universidad de Umeå y autor principal del estudio.
«Esto plantea serias preocupaciones para el futuro, ya que la expansión de las zonas deficientes en oxígeno puede aumentar la exposición humana a esta neurotoxina a través del consumo de mariscos», afirma Meifang Zhong, primer autor del estudio y estudiante de doctorado en el grupo de investigación de Capo.
Pérdida de oxígeno y contaminación por mercurio
En el estudio, los investigadores compararon la señal microbiana de sedimentos antiguos con la de la columna de agua actual y encontraron similitudes y diferencias notables. Mientras que los microbios metiladores de mercurio modernos del Mar Negro se ven influenciados por la contaminación industrial por mercurio y la eutrofización, los que vivieron hace miles de años se alimentaron principalmente de la pérdida de oxígeno y la acumulación de materia orgánica provocadas por el clima.
Los resultados resaltan la importancia de considerar las respuestas microbianas, tanto pasadas como presentes, al cambio ambiental. Mediante el estudio del ADN microbiano antiguo, los investigadores muestran cómo la desoxigenación provocada por el clima ha determinado, y seguirá determinando, los riesgos de contaminación por metilmercurio en los ecosistemas marinos.
Más información: Meifang Zhong et al., La desoxigenación impulsada por el clima promovió posibles metiladores de mercurio en la columna de agua del Mar Negro, Nature Water (2025). DOI: 10.1038/s44221-025-00526-4
