El cataclismo que partió la Tierra: Nuevas evidencias revelan cómo Sudamérica y África se separaron en un evento devastador


Un reciente estudio geológico desafía la teoría tradicional sobre la fragmentación continental, revelando que la separación entre Sudamérica y África fue provocada por una serie de erupciones volcánicas masivas hace 135 millones de años.

Este cataclismo desencadenó un enfriamiento global inesperado, una grave crisis en los océanos y alteró la evolución de la vida marina. El hallazgo redefine nuestra comprensión de la tectónica de placas y muestra cómo procesos geológicos extremos pueden moldear el destino del planeta.


Redacción Noticia de la Tierra


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Un reciente estudio geológico ha revelado que la separación de Sudamérica y África, que formaban parte del supercontinente Pangea, no fue un proceso gradual como se pensaba anteriormente, sino que fue desencadenada por una serie de erupciones volcánicas masivas hace aproximadamente 135 millones de años.​

Un evento volcánico de proporciones colosales

Investigadores han identificado que la fragmentación de Pangea comenzó con una erupción volcánica masiva que liberó alrededor de 16 millones de kilómetros cúbicos de magma. Este evento dejó evidencias en forma de rocas volcánicas en Sudamérica, África y el lecho marino del Atlántico. Además, se han detectado anomalías térmicas en el sur de Pangea, que podrían indicar la presencia de un penacho del manto terrestre responsable del debilitamiento de la corteza continental. Este debilitamiento facilitó la fractura de la corteza y la posterior separación de los continentes .​

Impacto climático inesperado

Contrario a lo que suele ocurrir con las erupciones volcánicas, que tienden a calentar el clima debido a la emisión de gases de efecto invernadero, este evento provocó un enfriamiento global. Se cree que la rápida descomposición del magma liberó aerosoles que reflejaron la radiación solar, disminuyendo las temperaturas globales. Este enfriamiento tuvo consecuencias significativas en la biodiversidad, afectando especialmente a la vida marina.​

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Repercusiones en la biodiversidad marina

La separación continental y las erupciones volcánicas asociadas provocaron una disminución del oxígeno en los océanos, desencadenando una grave crisis ambiental entre 185 y 85 millones de años atrás. Esta anoxia oceánica resultó en extinciones masivas de especies marinas, alterando significativamente el curso de la evolución .​

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Nuevas perspectivas en la tectónica de placas

Este descubrimiento desafía la visión tradicional de que la separación de los continentes fue un proceso lento y gradual impulsado únicamente por el movimiento de las placas tectónicas. En cambio, sugiere que eventos volcánicos catastróficos pueden desempeñar un papel crucial en la reconfiguración de la superficie terrestre. Además, destaca la importancia de los penachos del manto y las anomalías térmicas en la dinámica de la tectónica de placas.

Este estudio no solo redefine nuestra comprensión de la historia geológica de la Tierra, sino que también subraya la interconexión entre los procesos geológicos y climáticos, y su impacto en la biodiversidad.

Información recopilada de: Cadena SER, RPP Noticias, Teachy +