Los incendios forestales son una fuerza fundamental en la dinámica de la Tierra, con un impacto directo en la salud humana, la seguridad alimentaria y la biodiversidad. Desde la calidad del aire hasta la configuración del paisaje y la disponibilidad de recursos, las consecuencias del fuego han influido en el desarrollo de la sociedad a lo largo de la historia. Sus efectos en los océanos, aunque menos conocidos, son igualmente significativos.
por el Centro de Supercomputación de Barcelona
Los incendios liberan partículas y nutrientes a la atmósfera que recorren largas distancias y se depositan en las aguas oceánicas, lo que influye en el desarrollo del fitoplancton, microorganismos fotosintéticos acuáticos que absorben CO₂ de la atmósfera. Este fenómeno, similar al que ocurre cuando se fertilizan las tierras agrícolas para aumentar la producción, influye en el ciclo del carbono de la Tierra y, por lo tanto, tiene consecuencias para el equilibrio climático global.

Un nuevo estudio dirigido por investigadores del Barcelona Supercomputing Center—Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS) e ICREA, publicado en la revista Nature Climate Change , aporta nueva información sobre la relación entre los incendios forestales y los ecosistemas marinos . El trabajo muestra que el cambio climático podría aumentar significativamente los incendios, especialmente en zonas boreales, y, por lo tanto, las emisiones de hierro asociadas, así como el aporte de este micronutriente al océano, impulsando así la productividad del fitoplancton.
«Los incendios provocados por el clima surgen de condiciones meteorológicas más favorables para el fuego, como la baja humedad y las altas temperaturas , que a su vez se ven influenciadas por el cambio climático antropogénico . Comprender estos incendios y su impacto en la fertilización de regiones oceánicas clave como el Atlántico Norte es esencial para predecir con mayor precisión los niveles futuros de CO2 atmosférico « , afirma el profesor ICREA y AXA Carlos Pérez García-Pando, colíder del grupo de Composición Atmosférica del BSC y coautor principal del estudio.
Los investigadores han utilizado modelos climáticos avanzados para proyectar el aumento de las emisiones de hierro procedentes de los incendios, especialmente en las altas latitudes del hemisferio norte. En zonas del Atlántico Norte caracterizadas por la escasez de hierro, la deposición de estos nutrientes podría aumentar la productividad del fitoplancton, que no solo es la base de la cadena alimentaria marina, sino también fundamental en el ciclo del carbono, ya que estos microorganismos absorben grandes cantidades de CO₂ de la atmósfera mediante la fotosíntesis.

Aumento de la productividad marina en el Atlántico Norte
El estudio concluye que este aumento de las emisiones de hierro procedentes de los incendios provocados por el clima, que se proyecta entre 1,7 y 1,8 veces mayor que las proyecciones actuales que sólo consideran el efecto directo de la actividad humana sobre su evolución futura, podría aumentar la productividad marina en el Atlántico Norte debido a la deposición atmosférica hasta en un 40% en los meses de verano a finales del siglo XXI.
Sin embargo, la investigación también considera la disminución proyectada de otros nutrientes esenciales en vastas áreas oceánicas debido al cambio climático, lo que podría disminuir la capacidad del océano para absorber CO2 y atenuar los efectos positivos del aumento de la deposición de hierro.
«Cuantificar esta fuente de nutrientes para el fitoplancton es importante para obtener una idea más precisa de la cantidad de CO₂ que permanecerá en la atmósfera en las próximas décadas. Al determinar cómo los incendios provocados por el clima aumentarán el aporte de hierro al océano, revelamos un ciclo de retroalimentación crucial en el sistema terrestre que debemos comprender para abordar el cambio climático», indica Elisa Bergas-Massó, investigadora del BSC y autora principal del estudio.
El trabajo señala la necesidad de un enfoque multidisciplinario para comprender el papel del fuego en el sistema terrestre, que abarque la ciencia atmosférica , la oceanografía y la política climática , así como la importancia de mejorar las observaciones y los modelos para cuantificar mejor estos efectos y su impacto final en la absorción de CO 2 .
«Los resultados de este estudio son cruciales para mejorar las proyecciones del ciclo del carbono y la salud de los océanos en un clima cambiante, allanando el camino para modelos climáticos más precisos y políticas futuras de adaptación al cambio climático mejor informadas», concluye Maria Gonçalves Ageitos, investigadora del BSC y la UPC y coautora principal del estudio.
Más información: Elisa Bergas-Masso et al., Los incendios futuros provocados por el clima podrían impulsar la productividad oceánica en el Atlántico Norte, con escasez de hierro, Nature Climate Change (2025). DOI: 10.1038/s41558-025-02356-4
