Hanói bajo una nube tóxica: una semana de smog deja a la capital de Vietnam entre las ciudades con peor calidad del aire del mundo


Contaminación persistente, riesgos para la salud y una crisis ambiental que vuelve a encender las alarmas


Redacción Noticias de la Tierra


La ciudad de Hanói, capital de Vietnam, lleva más de una semana cubierta por una densa nube de smog tóxico que ha oscurecido el horizonte, afectado la vida cotidiana y colocado a la urbe entre las ciudades con peor calidad del aire del mundo, según el análisis divulgado por Phys.org. La contaminación, que se ha intensificado en los últimos días, ha provocado dificultades respiratorias entre los residentes y ha suscitado preocupación entre autoridades, científicos y organizaciones internacionales.

La persistencia del fenómeno confirma el profundo desafío ambiental que enfrentan las grandes ciudades del sudeste asiático, donde la urbanización acelerada, las emisiones industriales y condiciones atmosféricas específicas se combinan para producir episodios graves de contaminación.

Una nube densa que paraliza la rutina urbana

De acuerdo con la información reportada en la fuente original, el smog ha sido tan espeso que en algunos sectores de la capital vietnamita no es posible ver edificios a pocas cuadras de distancia. El cielo permanece gris durante las horas del día, mientras que las partículas contaminantes se acumulan en las calles, afectando a peatones, trabajadores y estudiantes.

Los habitantes de Hanói han recurrido a mascarillas de alta filtración y limitan en lo posible las actividades al aire libre. Las autoridades han recomendado permanecer en interiores y evitar esfuerzos físicos que incrementen la inhalación de aire contaminado. En redes sociales, miles de residentes describen problemas respiratorios, irritación ocular y dolor de garganta.

La capital vietnamita ha experimentado episodios de contaminación en el pasado, pero la duración y la intensidad de esta nube tóxica superan lo registrado en meses recientes.

Factores que explican el episodio de smog extremo

El fenómeno responde a una combinación de condiciones meteorológicas desfavorables y fuentes de emisiones contaminantes que se han intensificado en el área metropolitana. Los expertos destacan varios factores clave:

La fuerte actividad industrial en la periferia urbana, junto con el uso de combustibles fósiles en fábricas y vehículos, produce una gran cantidad de partículas finas. Estas partículas, conocidas como PM2.5, son especialmente peligrosas porque pueden ingresar profundamente en los pulmones y el torrente sanguíneo.

También influyen las condiciones atmosféricas propias de esta época del año. En los días recientes, se han registrado temperaturas más bajas y una atmósfera estable, lo que impide la dispersión del aire contaminado. Esta falta de circulación crea un “techo” que atrapa los contaminantes cerca del suelo.

Al combinarse estos elementos, el resultado es un episodio de smog persistente que ha empujado los niveles de contaminación a valores peligrosos para la salud humana.

Riesgos para la salud: un problema que se agrava

La exposición prolongada a niveles elevados de contaminación tiene consecuencias claras para la salud pública. Las partículas finas agravan enfermedades respiratorias como el asma y la bronquitis, aumentan la probabilidad de infecciones pulmonares y pueden afectar al sistema cardiovascular. Para niños, adultos mayores y personas con enfermedades crónicas, los riesgos son aún mayores.

En Hanói, los hospitales han reportado un incremento en consultas por síntomas respiratorios y oculares. Las autoridades sanitarias piden especial precaución a la población más vulnerable y recomiendan reducir la exposición al aire exterior. A largo plazo, episodios como este pueden contribuir al aumento de enfermedades crónicas, lo que crea una carga adicional para el sistema de salud del país.

Un reflejo de los desafíos ambientales en el sudeste asiático

El caso de Hanói no es aislado. Diversas ciudades de la región, desde Yakarta hasta Bangkok, enfrentan desafíos similares derivados de la contaminación industrial, el tráfico vehicular y modelos urbanos que crecen más rápido que las infraestructuras necesarias para garantizar aire limpio. Vietnam, en particular, ha experimentado un rápido desarrollo económico en las últimas dos décadas, lo que ha incrementado la demanda energética y la actividad de fábricas y construcciones.

A esto se suma el uso extensivo de carbón en plantas energéticas, una de las principales fuentes de emisiones contaminantes en el país. Aunque el gobierno vietnamita ha anunciado planes para reducir su dependencia de combustibles fósiles, los cambios estructurales avanzan más lentamente que el crecimiento urbano.

Medidas urgentes y desafíos de largo plazo

Las autoridades locales han comenzado a implementar medidas para enfrentar este episodio, como restricciones temporales al tráfico pesado, inspecciones a industrias y recomendaciones para evitar quemas agrícolas en zonas cercanas. Sin embargo, especialistas subrayan que estas acciones deben integrarse en estrategias a largo plazo si se busca reducir la frecuencia de eventos similares.

Entre las soluciones propuestas se encuentran el fortalecimiento de las redes de monitoreo de calidad del aire, la modernización del transporte público, la transición hacia energías más limpias y la aplicación estricta de normas ambientales para industrias y obras de construcción.

La participación ciudadana también es fundamental. La reducción del uso de vehículos privados, la elección de tecnologías más limpias y el apoyo a políticas ambientales contribuirían a mejorar la calidad del aire en la región.

Una crisis que revela la urgencia de actuar

El episodio de smog en Hanói es un recordatorio contundente de la vulnerabilidad de las ciudades en desarrollo ante la contaminación atmosférica. Lo ocurrido en la capital vietnamita pone en evidencia la necesidad de políticas integrales que combinen mitigación de emisiones, transformación urbana y protección de la salud pública.

En Noticias de la Tierra, este caso demuestra cómo los desafíos ambientales globales se manifiestan con particular intensidad en regiones de rápido crecimiento económico. La calidad del aire sigue siendo un problema urgente que requiere cooperación, inversión y cambios profundos en las prácticas urbanas e industriales.

Referencias

Phys.org. Vietnam’s capital shrouded in toxic smog for more than a week.
Equipo científico y autoridades citadas en la publicación original.