Investigadores de la UAB y la UB trabajan con comunidades indígenas amazónicas para comprender los problemas de salud desde una perspectiva holística, incluyendo a las personas, la fauna y el ecosistema.
por la Universidad Autónoma de Barcelona
«En los últimos años hemos estudiado diversos patógenos víricos y parasitarios, como la malaria y el Chagas, en comunidades amazónicas», explica Pedro Mayor, coordinador principal de la investigación y profesor del Departamento de Sanidad y Anatomía Animal de la UAB.
En esta ocasión nos hemos centrado en el tema del plomo, ya que estudios recientes sugieren que la munición utilizada por las comunidades amazónicas para la caza de subsistencia podría ser una ruta importante de exposición al plomo para los pueblos indígenas de la selva tropical.
El plomo es un metal tóxico altamente persistente y ampliamente distribuido a escala global. Se acumula en la cadena alimentaria y puede afectar varios órganos vitales. En niños, limita el desarrollo neuronal, mientras que en adultos causa daño hepático , así como problemas cardiovasculares y de fertilidad.
El estudio analizó los niveles de plomo en humanos, animales salvajes y peces, así como sus posibles fuentes (incluido el agua de los ríos utilizada para beber y cocinar, los suelos circundantes y las municiones de plomo utilizadas en la caza de subsistencia) en una región indígena muy remota del noreste de la Amazonía peruana, un entorno de bosques intactos y bien conservados.
El estudio identificó las principales vías de exposición al plomo en esta comunidad. Los resultados, publicados en Toxics , muestran que el agua de río —utilizada a diario para beber y cocinar— y la munición utilizada en la caza de subsistencia son las dos principales fuentes de contaminación. Las concentraciones promedio de plomo en sangre fueron de 11,74 microgramos por decilitro.
Aunque no existe un nivel seguro de exposición al plomo, niveles superiores a 5 microgramos por decilitro ya se asocian con efectos adversos para la salud. En la comunidad indígena estudiada, el 95,8 % de los niños menores de 12 años y el 94,5 % de los adultos superaron este umbral, lo que refleja una exposición generalizada de la población al plomo y una situación preocupante de riesgo para la salud.
Además, se detectaron altas concentraciones de plomo en animales salvajes y en el agua de río utilizada como fuente de agua potable. En animales salvajes , las concentraciones alcanzaron hasta 1,7 mg/kg de plomo en el hígado, muy por encima del límite de 0,1 mg/kg permitido en la carne para consumo humano según la legislación europea. El 99 % de las muestras de animales salvajes superaron el máximo legal permitido en la carne para consumo directo.
Hemos observado que las principales fuentes de plomo para los humanos son el agua de los ríos, que la población indígena utiliza para beber y cocinar, así como las municiones que utilizan para la caza de subsistencia. Los peces y la fauna silvestre transportan plomo desde el agua, y esta fauna también actúa como transportadora del plomo de las municiones, advierte el alcalde.
Esta amenaza que afecta a las poblaciones humanas también es importante para la salud de la fauna silvestre y del ecosistema en general, ya que el plomo se bioacumula y biomagnifica a lo largo de la cadena alimentaria. Además, este problema trasciende la selva amazónica, ya que en todos los bosques tropicales del planeta la principal herramienta utilizada por los cazadores de subsistencia es una escopeta con munición a base de plomo.
Martí Orta, coautor del artículo e investigador del Departamento de Biología Evolutiva, Ecología y Ciencias Ambientales de la Facultad de Biología y del Instituto de Investigación de la Biodiversidad (IRBio) de la Universidad de Barcelona, señala que «el problema del plomo va más allá de la Amazonia y podría tener implicaciones globales para la salud de las poblaciones indígenas, ya que actualmente las escopetas y la munición a base de plomo son las principales herramientas utilizadas por las comunidades que cazan y consumen carne de animales silvestres como medio de subsistencia».
Tradicionalmente, la contaminación por plomo se asocia con entornos industrializados y con actividades mineras y de reciclaje de residuos. Los investigadores advierten que la evidencia de altos niveles de plomo en zonas remotas y no industrializadas demuestra la urgencia de implementar políticas regionales para prevenir la exposición a este metal mediante sistemas eficaces de filtración de agua potable y el uso de munición no tóxica y sin plomo.
Más información: Pedro Mayor et al., Niveles altos inesperados de plomo en sangre en una comunidad indígena remota de la Amazonía peruana nororiental, Toxics (2025). DOI: 10.3390/toxics13100826
