La Tierra está absorbiendo más luz solar y atrapando más calor del que libera al espacio, lo que provoca que nuestro planeta se caliente a un ritmo cada vez mayor.
Una nueva investigación muestra que las áreas nubladas sobre los océanos están reflejando menos luz solar al espacio que antes, lo que aumenta el calentamiento causado por el aumento de los niveles de gases de efecto invernadero y provoca una aceleración del cambio climático .
El estudio, publicado en Environmental Research Letters, encontró que este efecto de atenuación estaba ocurriendo en varias regiones, incluidas las áreas nubladas frente a las costas de California y Namibia, pero también en los márgenes de la Antártida, donde el reciente y significativo derretimiento del hielo marino también puede explicar una mayor absorción de luz solar por los océanos.
El profesor Richard Allan, autor principal del estudio en la Universidad de Reading, afirmó: «Piensen en la Tierra como un espejo que refleja la luz solar hacia el espacio. Con el tiempo, ese espejo se va ensuciando, especialmente sobre nuestros océanos, donde las nubes están cambiando. Esto significa que se absorbe más energía solar en lugar de reflejarla, lo que contribuye al calentamiento causado por las emisiones de gases de efecto invernadero» .
Un enigma importante por resolver es: ¿se están derritiendo las nubes a medida que suben las temperaturas, como un espejo que se empaña? ¿O está desapareciendo la contaminación atmosférica que, artificialmente, iluminaba el espejo como un spray limpiador?
Necesitamos averiguar qué causa que las nubes pierdan brillo para comprender la magnitud y la velocidad del calentamiento global. Este notable oscurecimiento global ayuda a explicar por qué observamos un calentamiento sin precedentes en 2023.
Impactos de la contaminación del aire
Los investigadores examinaron el calentamiento ocurrido entre 2022 y 2023 y descubrieron que la superficie del océano se calentó incluso más rápido de lo que podría explicarse únicamente por el aumento de la absorción de energía. Esto los llevó a la conclusión de que, o bien el calor se concentraba en una capa oceánica menos profunda de lo normal, o bien el calor sobrante almacenado en capas oceánicas más profundas estaba regresando a la superficie.
La segunda explicación se alinea con el desarrollo de las condiciones de El Niño en 2023, cuando el agua cálida de las profundidades del océano subió a la superficie en el Pacífico.
El estudio también descubrió que el este de China refleja menos luz solar de lo esperado, probablemente debido a los esfuerzos exitosos para reducir la contaminación del aire. Este hallazgo es significativo porque, si bien reducir la contaminación del aire mejora la salud pública , un aire más limpio también permite que más luz solar pase a través de la atmósfera y las nubes para llegar a la superficie de la Tierra, lo que se suma al calentamiento debido al aumento de los gases de efecto invernadero que atrapan el calor.
La investigación sugiere que estas reducciones en las partículas de aerosol sobre China podrían estar influyendo en los patrones climáticos más allá de sus fronteras, afectando potencialmente los patrones de nubosidad y temperatura en la región del Pacífico Norte a través de los patrones de viento atmosférico.
Más información: Richard P. Allan et al., Reconciliando el creciente desequilibrio energético de la Tierra con el calentamiento de los océanos, Environmental Research Letters (2025). DOI: 10.1088/1748-9326/adb448
