Una cápsula del tiempo de 600 millones de años: minerales del Himalaya revelan secretos de los antiguos océanos


El agua atrapada en depósitos minerales permite vislumbrar la historia de la Tierra y la dinámica del clima


Atrapada en depósitos minerales, se encuentra una extraordinaria reliquia del pasado remoto de la Tierra: gotas de agua que probablemente procedían de un antiguo océano de hace casi 600 millones de años. Un asombroso hallazgo arqueológico, oculto entre las montañas del Himalaya, desvela pistas tentadoras sobre la evolución de la Tierra y ofrece una ventana a los enigmáticos acontecimientos de oxigenación que dieron forma a su historia.

Prakash Chandra Arya, estudiante de doctorado del Centro de Ciencias de la Tierra (CEaS) del IISc y autor principal del estudio, describió sus hallazgos como una “cápsula del tiempo para los paleocéanos”, sugiriendo que estos depósitos minerales encierran una valiosa información sobre las condiciones de los océanos que existieron hace eones.

Hace entre 700 y 500 millones de años, la Tierra sufrió la Glaciación global, caracterizada por vastas capas de hielo que cubrían gran parte del planeta. A esta época glacial siguió un aumento del oxígeno atmosférico, conocido como el Segundo Gran Evento de Oxigenación. Esta oxigenación fue un momento crucial que allanó el camino para la aparición de formas de vida complejas. Sin embargo, hasta ahora ha sido difícil comprender la relación exacta entre estos acontecimientos, debido sobre todo a la escasez de fósiles bien conservados y a la desaparición de los antiguos océanos.

Curiosamente, el Himalaya puede ser la clave para resolver este rompecabezas. Las rocas marinas expuestas que se encuentran en esta región ofrecen una oportunidad única para estudiar los antiguos océanos de la Tierra. Mientras que los océanos modernos siguen estando bien explorados, gran parte de los antiguos permanece rodeada de misterio. Prakash Arya subraya que este descubrimiento podría arrojar luz sobre cuestiones fundamentales acerca de los océanos del pasado, como sus niveles de pH, composiciones químicas y proporciones isotópicas.

La investigación, con colaboración entre el Instituto Indio de Ciencias (IISc) y la Universidad de Niigata (Japón), y publicada a fines de julio en Precambrian Research, se centró en los depósitos minerales que se remontan a la época de la glaciación. El análisis de estos depósitos proporcionó datos fascinantes sobre las condiciones de las cuencas sedimentarias durante esta época.

Exposiciones de campo de magnesita cerca de las colinas de Chandak, Kumaon. Microfotografías de agua oceánica atrapada en cristales de magnesita. (imágenes: Prakash Chandra Arya)Exposiciones de campo de magnesita cerca de las colinas de Chandak, Kumaon. Microfotografías de agua oceánica atrapada en cristales de magnesita. (imágenes: Prakash Chandra Arya)

La escasez de calcio, posiblemente debida a la limitada aportación fluvial, parece haber sido una característica definitoria de este periodo. Influyó en la formación de depósitos de magnesio. Sorprendentemente, estos depósitos parecen haber encapsulado gotas de agua del antiguo océano mientras cristalizaban, formando una cápsula del tiempo única.

La meticulosa búsqueda de estos yacimientos abarcó una vasta extensión del Himalaya occidental de Kumaon. La región entre Amritpur y el glaciar de Milam, así como desde Dehradun hasta la zona del glaciar de Gangotri, produjo estos valiosos depósitos minerales. Rigurosos análisis de laboratorio confirmaron su origen, descartando fuentes alternativas como la actividad volcánica submarina.

“No sabemos mucho sobre los océanos del pasado”, destaca Prakash. “¿En qué se parecían o diferenciaban de los océanos actuales? ¿Eran más ácidos o más básicos, ricos en nutrientes o deficientes, calientes o fríos, y cuál era su composición química e isotópica? Estos datos también podrían proporcionar pistas sobre el clima de la Tierra en el pasado, y esta información puede ser útil para la modelización del clima”, resaltó.

La falta de calcio también provocó probablemente una deficiencia de nutrientes, lo que favoreció el crecimiento lento de las cianobacterias fotosintéticas, que podrían haber empezado a expulsar más oxígeno a la atmósfera. “Siempre que aumente el nivel de oxígeno en la atmósfera, se producirá una radiación biológica (evolución)”, afirmó el investigador.

La investigación ofrece una cautivante narración del pasado de la Tierra. Desvela una pequeña pero conmovedora pieza de un rompecabezas que ha intrigado a los científicos durante generaciones. Con cada yacimiento mineral como testimonio de un océano lejano, este estudio tiende un puente entre la Tierra antigua y la moderna, enriqueciendo la comprensión de la compleja historia del planeta.

Fuente: https://www.infobae.com